Con el propósito de generar entornos seguros para niñas, niños y adolescentes, la Secretaría de Educación de Guanajuato compartió a través del webinar 1,2,3 X La Educación, el tema “Prevención de conductas de riesgo en infancias y adolescencias”, dirigido a docentes de nivel básico.
El objetivo es brindar al colectivo docente un panorama general que pueda ayudarlos a brindar información, detectar y atender oportunamente aquellas circunstancias que se presentan dentro del aula y fuera de ella, así como contar con herramientas para su prevención.
La Doctora Blanca Aguilar, de la Secretaría de Salud del Estado, fue la encargada de proporcionar la información referente a las acciones de prevención que se pueden implementar en los centros escolares, así como acciones preventivas que se pueden implementar en casa.
Por medio de estas herramientas se pueden lograr entornos seguros; comprender puntos muy específicos como, adecuar los espacios físicos en los que los estudiantes se desenvuelven, por medio de la instalación de barandales, protecciones, siempre estar al pendiente de los menores cuando realicen sus actividades físicas.
Así también se hicieron recomendaciones que permitan prevenir intoxicaciones, manteniendo las sustancias tóxicas bien etiquetadas, medicamentos resguardados bajo llave y fuera del alcance de los pequeños, utilizar tapas a prueba de niñas y niños.
Por su parte, el Lic. Oscar Murúa enlace Jurídico de Delegación Regional Norte, compartió recomendaciones que el docente puede implementar tanto en el aula, como directo con los menores en un entorno de confianza.
En lo que respecta a las aulas, es recomendable plantear un reglamento, que priorice la dignidad de las niñas, niños y adolescentes, así como la del docente. Se deben buscar aquellos espacios de respeto y tolerancia.
De la misma manera, es importante qué niñas, niños y adolescentes, conozcan sus derechos y obligaciones como estudiantes. Es necesario, también, contar con espacios óptimos para la resolución de conflictos, implementando el modelo de convivencia.
Por otro lado, cuando se presentan situaciones de riesgo fuera del aula o de las instituciones, se debe identificar las necesidades para resolver desde la perspectiva de las niñas, niños y adolescentes, no desde la perspectiva adulta.
Hay que considerar que cuando el alumno se acerca al docente, es porque existe un vínculo de confianza, por lo que se debe identificar cuál es la situación por la que atraviesan, así como notificar a los padres y madres para su involucramiento.
Finalmente, valorar si es necesaria la canalización al Sector Salud en caso de que se requiera atención médica o psicológica. En caso de la presunta comisión de un delito, se tiene que dar parte a la autoridad competente.